Partiendo de la base de que al anunciar un producto tenemos que saber a quién va dirigido y para qué queremos llamar su atención, existen unos trucos que os pueden ayudar a que esa publicidad que reflejas sea más exitosa.
1. Eslogan. Cuando una persona coge un folleto, sabe que lo que sostiene es publicidad. La forma de llegar a ellos lo primero que van a ver, lo más destacado. Quieres que quien sostenga tu folleto se lo quede, no que lo tire. Para conseguir un buen eslogan es necesario un mensaje claro y directo, así el consumidor querrá saber más.
2. El mensaje. Tiene que ser creativo, que destaque. Así te quedarás con la atención del consumidor. Piensa en juegos de palabras o algún rasgo que identifique a la marca.
3. El color. No es necesario que sean panfletos muy llamativos, pero sí que tenga un poco de color para romper con el clásico blanco y negro. Si es demasiado llamativo el lector se puede sentir abrumado.
4. Las imágenes. Invertir el espacio en algo que muestre los productos que se venden o qué se puede sacar con ellos.
5. Modelo AIDA. Describe los efectos que produce, de manera secuencial, un mensaje publicitario en el interlocutor: Atención, Interés, Deseo y Acción. Es decir, el folleto tiene que llamar la atención para tener ganas de leer más y hacer que terminen adquiriendo el producto que ofrecemos.